No hay duda de que las personas con TDAH generalmente muestran un aspecto enérgico y repleto de vitalidad. Pero lo cierto es que son personas que se esfuerzan cada día por vencer un agotamiento crónico provocado por sus síntomas.
Cuando hablamos de trastorno por déficit de atención e hiperactividad nos imaginamos una persona hiperactiva, con un nivel de energía muy elevado y una actividad frenética.
Sin embargo, las personas con TDAH suelen estar muy cansadas. La fatiga forma parte de su día a día y la sensación constante de agotamiento les sigue como si fuera su propia sombra. Y no se trata solo de un cansancio físico sino también de un cansancio mental y emocional que es aún más preocupante.
¿ES EL TDAH LA EXPLICACIÓN AL CANSANCIO PERMANENTE?
Lo cierto es que no hay una única causa que lo explique, más bien es un cóctel de problemas que forman la tormenta perfecta para que el TDAH provoque tanta fatiga. Estos son los motivos más habituales.
1.Hiperactividad e hiperconcentración
La hiperactividad en el TDAH puede ser agotadora a nivel físico. Esa necesidad constante de moverse y la dificultad de permanecer quieto consumen una cantidad significativa de energía. Por el contrario, la hiperconcentración suele provocar agotamiento, pero mental ya que, durante la hiperconcentración, las personas pueden estar tan absortas en una tarea que ignoran necesidades físicas como comer…