Es hora de hablar de Green BPM

“No hay penas en la tierra que la tierra no pueda curar” le dijo Jon Muir a Roosevelt en Yosemite, y tal fue el efecto que ocasionó en este al contemplar tanta belleza que al regresar de la acampada creó el National Park Service logrando así la protección y creación de los primeros Parques Nacionales: Yosemite, Sequoia, Mount Rainier, Petrified Forest y Grand Canyon.

El pasado 5 de junio, se celebraron los 49 años de la proclamación internacional del día del medioambiente. “No hay otra tierra”, fue el lema de este año, escogido para concientizar sobre los problemas medioambientales más urgentes de nuestra actualidad y para impulsar acciones que ayuden a su conservación.

No importa la denominación, sector o actividad económica a la que pertenezca la empresa, vivir en armonía con la naturaleza, concienciarnos y garantizar la protección del medio ambiente es posible siempre que se incorporen objetivos de sostenibilidad en la gestión por procesos BPM.

El objetivo de BPM es fundamentalmente ayudar a las organizaciones a ser más productivas y más rentables, y con esa bandera, durante muchos años se han cometido excesos y abusos que hoy, con un corazón más verde, lamentamos profundamente.

Muchos líderes de negocios están reflexionando sobre este tema y algunos ya han comprendido que el costo de lograr una mayor productividad o rentabildiad no debe ser la degradación del entorno natural, el consumo de recursos de forma irresponsable, las emisiones de gases de efecto invernadero o la producción de residuos ocasionados por su propia operación.

¿Qué pensaría John Muir si supiera que las transacciones de bitcoin(con las limitaciones de hoy) de un año genera la misma cantidad de desechos electrónicos que arrojar 438.000.000 iphones a la basura (aprox 1 trans = 2 iphones; 600.000 transacciones de bitcoin al día). El problema de los desechos electrónicos va en aumento y sino incorporamos a nuestros procesos de negocios, indicadores de sostenibilidad, de nada vale que celebremos el día del medioambiente sembrando árboles y selfies en instagram.

El concepto de Green IT no es nuevo, data del año 1992 por EPA (Agencia de Protección Ambiental) de los Estados Unidos. EXIN tiene dentro de su catálogo de cursos certificables el nivel de Green IT Foundation. Pero el tema va más allá de una buena imagen profesional o corporativa. Se trata de la gestión, el control, la medición y el ahorro de energía y el uso eficiente de los recursos para la realización de las actividades empresariales.

La incorporación de “Alertas Verdes” en el ciclo de la gestión de BPM, es una excelente forma de empezar. Estamos hablando de un Análisis, Diseño y modelado verde de procesos de negocio, de la monitorización verde de procesos y de la ejecución verde de las mejoras y acciones correctivas.

Utilizando la simulación de escenarios.

Muchas herramientas de BPMS incorporan en sus versiones más básicas la creación de escenarios para los modelos de procesos, que permiten analizar combinaciones de datos y observar los posibles resultados. Bastará parametrizar el escenario con el consumo de tiempo, recursos, y costes asociados a los recursos y las actividadades para tener un parámetro inicial de referencia.

Normalmente obtendremos el % de utilización de cada recurso, que nos permitirá saber el tiempo que estuvo ocupado durante el período de ejecución de la simulación. Evidentemente el recurso involucrado, debe estar identificado en la identificación de los aspectos contaminantes de la actividad del negocio.

En conclusión, las alertas verdes pueden incorporarse a los kpis de los procesos tomando en cuenta los parámetros obtenidos de la simulación, para que, al ser superados, se tome la decisión correcta. Ya sea informar a un responsable sobre una situación anómala, detener la ejecución del proceso ante una situación que exceda el parámetro medioambiental o disparar automáticamente eventos para ser gestionados por otras áreas. Fundamentalmente el objetivo es definir distintos tipos de alertas verdes, con diferentes grados de impacto negativo medioambiental para poder actuar a tiempo.