Actualmente, el tamaño del mercado mexicano es de 130 millones de personas y se espera que esta cifra continue en aumento en los próximos años, hasta alcanzar los 133 millones en 2025. Esto representa un gran espacio de oportunidad, además por su amplio ecosistema de startups, el tercero más importante del continente tras Brasil y Chile según un reciente informe de StartUp Blink.
Las empresas españolas pueden encontrar en el mercado mexicano grandes oportunidades tanto de inversión como de colaboración. México es una de las mejores puertas de entrada al mercado norteamericano y latinoamericano. Por otra parte, para las compañías mexicanas España es su puente natural hacia Europa. Además, España es el segundo país con mayor volumen de inversiones en México, detrás de EE. UU.. Igualmente, en los últimos años se ha detectado un interés creciente por inversores mexicanos en los desarrollos españoles.
Todo esto representan representa enormes oportunidades para el desarrollo del ecosistema de innovación en ambos países. Y pude constatarlo tras mi última visita a México con la organización de ftalks Food Summit LATAM, el encuentro de innovación alimentaria que de España ha saltado a México para promover el intercambio y las sinergias entre startups, inversores y corporates de ambos continentes.
El sector agroalimentario en México es un sector maduro y de gran tamaño. Ocupa el 11.º puesto mundial y supone el 7 % del PIB del país. De esta manera, México es probablemente considerado el destino en América Latina que presenta más oportunidades y ventajas para generar proyectos de inversión y emprendimiento en el sector foodtech.
Las empresas de la industria alimentaria se encuentran inmersas en un cambio de paradigma propiciado por la creciente preocupación por el cuidado del medio ambiente y por los cambios de hábitos de los consumidores, sumado a un entorno complejo con una fluctuación en las materias primas, aumento de los costes de la energía y una inflación alta. Ante ello, el foodtech está viviendo una explosión en Latinoamérica, creando un espacio de oportunidad para acelerar la transformación del sistema alimentario en la región y apoyar a los emprendedores.
En relación con el sector foodtech mexicano, México es un mercado con enorme potencial de crecimiento gracias a su ubicación, su tamaño, sus recursos naturales y su ecosistema emprendedor, actuando, además, como puerta de acceso al resto de América Latina y EEUU. Sin embargo, su éxito dependerá en gran medida del desarrollo global de la industria y la mejora del acceso a la financiación.
Por otra parte, también se estima un incremento del 25,5 % en el gasto medio en alimentación de los hogares mexicanos para el año 2027. Buenas noticias para empresas foodtech españolas que deseen abrir mercado en este país, como las que nos acompañaron este año en ftalks Food Summit LATAM: Trazable, Oscillum, Iczia y Brandsummit.
Según el informe de ICEX sobre el Estado del foodtech en México, la industria está experimentando un rápido crecimiento a nivel global y se espera que el continente latinoamericano sea uno de los de mayor desarrollo en los próximos años, con México como uno de los líderes regionales en el sector. Para ello, será fundamental aumentar el flujo de inversiones hacia los nuevos proyectos de emprendimiento, algo que se espera que suceda conforme la industria vaya madurando.
Según el mismo informe, los subsectores más relevantes en el ámbito alimentario y especialmente relacionado con la tecnología y la innovación son el agritech, innovación en producto, el envasado o packaging y la distribución. El acceso a la financiación y la falta de adopción de tecnología son las principales barreras de acceso al sector.
Catalina Valencia Zuluaga es Community Lead en KM ZERO Food Innovation Hub y además mentora en Interacpedia, EIT Food, Demium, etc. Responsable de StartUp Europe Awards de la Comisión Europea y la Fundación Finnova hasta 2019. Elegida la persona que más promueve el ecosistema emprendedor en los VLC Startup Awards del Ayuntamiento de Valencia.
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