El gran hermano te vigila – apaga tus dispositivos inalámbricos –

Vivimos desde hace mucho tiempo en un mundo hiperconectado, rodeados de dispositivos que requieren de conexión a internet y, en la gran mayoría de los casos, a través de protocolos inalámbricos. Uno de los estándares más populares y que seguro que todos conocemos es el protocolo IEEE 802.11 ampliamente usado en las redes wireless.

Sin duda alguna, esta conectividad trae grandes ventajas y beneficios para los usuarios que hacen uso de esta tecnología a diario. Si nos ponemos a contabilizar cuántos dispositivos inalámbricos llevamos encima seguro que nos salen más de dos o tres. Pero ¿supone un riesgo para nuestra seguridad personal disponer de tantos dispositivos que transmiten información al aire? ## Obtención de inteligencia mediante la captación de señales RF

Normalmente para realizar la localización de un objeto o persona, se hace de forma activa, es decir, disponemos de un dispositivo que es capaz de transmitir su posición a través de una tecnología de comunicaciones: GSM, SIGFOX, etc. Pero ¿qué sucede si somos capaces de seguir y localizar a una persona de forma pasiva sin que esta necesite disponer de ningún objeto adicional?; veamos cómo.

Para obtener inteligencia a través de las señales de radio, es necesario hacer servir distintos sensores que, ubicados en puntos estratégicos, nos permitan poder hacer un mapa de dónde se están produciendo las comunicaciones en un entorno determinado y, con esta información, identificar objetos y/o personas.

Para ver cómo se puede obtener inteligencia, abordaremos el caso de las ciudades. Seguro que los habrás visto, pero igual no conoces cuál es la función de muchos de los sensores que existen en nuestras ciudades. Por ejemplo, muchas de las ciudades más modernas, disponen de sistemas de control de aforos aplicadas normalmente a la medición de parámetros de tráfico y movilidad. Para ello se despliegan estaciones permanentes en puntos concretos de la ciudad, que proporcionan datos sobre la intensidad de vehículos, bicicletas y peatones.

No sólo existen este tipo de sensores, en una ciudad podemos encontrar muchos más; veamos, a continuación, los distintos tipos de sensores, y las tecnologías que usan:

Cámaras con capacidad de identificar obejtos

Muchas de las cámaras de gestión de tráfico que vemos en las ciudades, ya disponen de tecnología avanzada, como para diferenciar objetos (peatones, bicicletas, vehículos, etc), además con el software apropiado son capaces, incluso de leer matrículas, y comprobar en bases de datos la información que reciben.

Aforador radar

Dispositivo que dispone de un pequeño radar, normalmente ubicado en un poste junto a una vía, que opera en la banda de microondas. Al mismo tiempo, el sensor proporciona conteo de vehículos por carril, ocupación, velocidad y clasificación en hasta 12 zonas de detección definidas por el usuario

Aforador Bluetooth y/o wifi

Esta estación detecta y mide las señales wifi y bluetooth recibidas desde los dispositivos a su alcance. Con la información recopilada, clasifica las señales y las almacena de forma individual con un identificador único. Con varias estaciones de este tipo, es posible detectar el mismo dispositivo a lo largo de una ruta.

Para nuestro artículo, este sensor es el más interesante, y a continuación veremos por qué. Pero empecemos a unir piezas, imaginemos que somos capaces de combinar la información recibida por el sensor, con la matrícula del vehículo, tendríamos una forma inequívoca de identificar a un individuo y poder saber en todo momento por donde ha pasado, cuál ha sido su rutina de viaje, y muchos datos más.

Otros dispositivos

Pero no sólo en el exterior, en las ciudades, también existen otros dispositivos que permiten tracear a las personas escuchando solamente las comunicaciones que emiten sus dispositivos inalámbricos. Por ejemplo, los usados en los centros comerciales, supermercados, etc. Todos ellos, utilizan los “beacons” que transmiten nuestros dispositivos móviles para tratar de identificar de forma única a los individuos con fines comerciales y/o de marketing. Información que les permite saber cuál es el recorrido que hacen las personas en un centro comercial, qué lineales se visitan más en un supermercado, etc.

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